sábado, 24 de marzo de 2012

El corazón de las tinieblas

Ficha: "El corazón de las tinieblas", Joseph Conrad, Editorial Universidad Veracruzana - México, 96 páginas, ISBN: 970-18-1913-6

Para variar un poco de tema y abandonar, por breve espacio de tiempo, mis lecturas de temática filosófica, me embarqué en esta pequeña novela, más bien largo relato, del escritor polaco-británico Joseph Conrad. Un autor al que solo conocía a través de comentarios de terceros, no demasiado buenos, al que reprochaban su estilo extremadamente denso y retorcido, nada fácil de leer.

Por eso quizás me intrigaba y despertaba mi curiosidad... de modo que aproveché que dicha obra estaba dentro del programa del club de lectura Macondo, de Alhama de Murcia al que me sumo ocasionalmente, para leerlo y de paso matar no solo dos, sino varios pájaros de un tiro.

Esta es la obra más conocida de este escritor, en ella y de forma muy libre se basa la película "Apocalipse Now" de Francis For Coppola, ambientada en la guera de Vietnam. La novela no tiene nada que ver con esa guerra aunque comparte con la historia de la película el viaje fluvial a través de la selva y la búsqueda del enigmático Kurtz. En la película es un coronel que se dedica a hacer la guerra por su cuenta y que ha perdido el contacto con el resto del ejército... el Kurtz de la novela es un personaje bastante similar.

Y esa es toda la historia que se puede resumir muy brévemente en el viaje que emprende desde Gran Bretaña el marinero Marlow que acaba de enrolarse en una expedición a África comenzando su trabajo a las órdenes de una compañía que explota principalmente el marfil. Estamos a finales del siglo XIX y el África colonial está en plena expansión. A Marlow se le ordena relevar a un tal Kurtz que por lo visto se ha convertido en toda una leyenda para la compañía. El mismo estableció tiempo atrás un puesto comercial avanzado en el interior de la selva, solo accesible a través de un larguísimo y peligroso viaje río arriba. El viaje mostrará la inhumanidad de la explotación colonial, y el proceso interior que vive el protagonista cuyo diálogo interno y recuerdos va desgranando lenta y pausadamente a través de las densas, densísimas páginas de esta corta obra.

El proceso nos muestra una humanidad cada vez más desolada, una exploración de la soledad, de la locura y los miedos ancestrales del ser humano en esa jungla tenebrosa y amenazadora. Fruto de la época en la que fue escrita también nos mostrará la visión del hombre blanco de los indígenas africanos... un retrato nada amable, inhumano y animal aunque no exento de compasión, que nos mostrará aunque sea de forma indirecta y de pasada la crueldad y la salvaje explotación a la que fue sometida África en aquella época bajo una supuesta acción "civilizadora" que constituyó, sobre todo en el caso del Congo Belga lugar donde se realiza la acción aunque nunca se le nombre diréctamente, uno de los más espantosos genocidios de la historia de la humanidad.

El encuentro final entre Marlow y Kurtz y la tragedia pondrán punto y final a una obra con un tono marcadamente pesimista y sombrío... definitivamente Joseph C. no tenía demasiada fe en el ser humano, el denso y recargado relato se ajusta como un anillo al dedo a la impresión de angustia y opresión que el escritor pretende recrear en el lector y al desquiciado estado psicológico del personaje que no deja de sorprender y dar bandazos en un sentido u otro, al final uno no termina haciéndose una idea de cuales son realmente sus pensamientos, si admira u odia, si compadece o envidia a un fantasmal Kurtz convertido aquí en un símbolo de lo que el exceso de ambición sumado a la soledad de una tierra salvaje e inhóspita puede hacerle a un ser humano que ha perdido completamente los papeles y termina enloquecido creyéndose poco menos que una deidad... para terminar al final del modo más miserable.

"Fue un momento de triunfo para la selva, una irrupción invasora y vengativa, que me pareció que debía guardar sólo para la salvación de otra alma. Y el recuerdo de lo que había oído decir allá lejos, con las figuras cornudas deslizándose a mis espaldas, ante el brillo de las fogatas, dentro de los bosques pacientes, aquellas frases rotas que llegaban hasta mí, volvieron a oírse en su fatal y terrible simplicidad. Recordé su abyecta súplica, sus abyectas amenazas, la escala colosal de sus viles deseos, la mezquindad, el tormento, la tempestuosa agonía de su espíritu. Y más tarde me pareció ver su aire sosegado y displicente cuando me dijo un día: 'Esta cantidad de marfil es ahora realmente mía'."


Lo mejor: El ambicioso relato psicológico, la inagotable capacidad de Conrad para las descripciones imaginativas que preñan el mismo y le otorgan un intenso contenido emocional de principio a fin.

Lo peor: Un estilo denso, espeso, a veces parece que más que leer estuviera uno removiendo un bote de alquitrán con un palo... un chorro continuo de descripciones y adjetivos hasta en las acciones más nimias y sencillas, una lentitud de acción exasperante... paralela a la desesperación del protagonista principal que parece que nunca va a llegar a su objetivo. Al igual que a Marlow el lector puede tener la sensación de andar perdido y engullido por la densidad selvática de un relato que no parece tener fin pese a su aparente brevedad.



1 comentario:

  1. Me encató esta novela. Lo peor,para mi, también forma parte de lo mejor. Al sentir que "estuviera uno removiendo lo bote de alquitrán con un palo..." me setía trasladado a esa atósfera donde la humedad ronda el 100%. Genial.

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