sábado, 27 de abril de 2013

Me arrepiento del mañana


"La madurez llega cuando te das cuenta de que el FIB, el Sonar, el Viñarock... etc... son campos de concentración que deberían estar prohibidos por Amnistía Internacional, la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU y la Convención de Ginebra. Y si no, ¿por qué el 90% de los festivaleros toman drogas? ¿Acaso no hubieran tomado drogas en Auschtwitz si hubieran tenido?"


Ficha: "Me arrepiento del mañana", Enrique Rubio, editado por Enrique Rubio, Guillermo Rubio y Sublima Comunicación, 218 páginas, ISBN 978 84 616 3037 0

He aquí el último libro perpetrado por mi paisano, mal que le pese, Enrique Rubio, toda una sorpresa agradable de principio a fin.

Enrique es un viejo conocido de este blog, su primer libro, y para mí todavía lo mejor que ha escrito, "Tengo una pistola" me fue recomendado por un colega de actividades deportivas que le conoce personalmente... ante su insistencia terminé comprándolo y leyéndolo, fue todo un descubrimiento, con ese libro enterré para siempre el prejuicio de considerar "sospechoso" cuanto tuviese la firma de un autor murciano... aunque fuese por accidente ;-). Posteriormente el librito donde se recopilan dos relatos suyos titulado "Cárcel" y sobre todo su última novela "TANiA CON i® 56.ª edición" una obra con la que disfruté un montón con su bombardeo de su visión irónica de la modernidad, las modas y la superficialidad... el sentido del humor de Enrique es dirécto y corrosivo, no deja títere con cabeza y desde luego que no es plato del gusto de todo el mundo. Posiblemente esto es lo que más me gusta de su forma de escribir, sus ideas que quedan en las antípodas de lo "políticamente correcto" aunque hay bastante más en ellas de lo que parece.

Y aquí estamos de nuevo con un libro suyo... en ocasiones he comentado en este blog los aspectos no solamente de contenido sino también estéticos de los libros que llegan a mis manos, habitualmente para comentar negativamente alguna horrorosa portada. Evidentemente no es lo que más importa de un libro pero si que es verdad que un buen libro puede verse perjudicado por un pésimo diseño, nunca me han dolido prendas en comentar algo así sobre todo cuando un libro me ha gustado y creo que la presentación del mismo puede hacerle un flaco favor. Tengo que comentar de nuevo algo sobre el diseño de un libro aquí pero justo en otro sentido... y es que la nueva obra de Enrique llama la atención por su diseño "a contracorriente", en estos tiempos donde se lleva lo electrónico, los e-readers, tablets y demás chismes que pretenden llevar al libro a una nueva dimensión donde ya solo importa lo más importante vale, el contenido, pero donde algo más como la forma y el diseño y en definitiva lo que posee como objeto en sí que es desaparece. No soy uno de esos nostálgicos que proclaman la bondad del papel y repudian las nuevas tecnologías, yo mismo tengo un lector de libros electrónicos en el que he leído, y comentado por supuesto, unos cuantos en este blog... pero reconozco que al igual que sucede con algunos grandes discos que también eran en sí mismos obras de arte por sus portadas algo se pierde con ello... es muy práctico, al igual que escuchar música en un reproductor MP3, pero da la sensación de que no termina de ser lo mismo... igual es que soy ya demasiado viejo, no lo se ;-).


Enrique nos obsequia con un diseño distinto, "Me arrepiento del mañana", viene en un formato original que un servidor no había visto nunca, un libro que simula el recipiente de un producto tóxico, con su tapón enroscado en la portada, de un color blanco lejía y con un interior en un estridente anaranjado... por supuesto con sus correspondientes símbolos de "tóxico" e "inflamable" y no solamente en la portada. Un libro que cuida las formas al máximo, que incluso carece de lomo y trae las hojas cosidas y barnizadas para poder abrirlo completamente de par en par y facilitar así su lectura, que está compuesto de papel de buena calidad y que en definitiva llama mucho la atención y parece destinado o bien a permanecer junto a los productos de limpieza para no desentonar con el resto de libros de nuestra biblioteca o a permanecer en la mesita de noche como esos "breviarios de oraciones" ... ¡dichoso tapón!.

¿Qué podemos encontrar en el interior de esta joya del diseño literario?, pues una colección de sesenta artículos del amigo Enrique, algunos publicados en el periódico La Verdad de Murcia, algunos en su blog, y una buena parte de los mismos son inéditos. Cómo él mismo comenta en Internet la idea del libro antecede a los artículos y al blog de ahí que se guardase material para publicarlo en formato impreso... el que él mismo sea editor de su libro da una buena idea de la libertad bajo la que ha querido escribir, directamente sin intermediarios, al estilo de lo que hacemos cualquiera de los blogueros que nos asomamos a Internet pero con la pretensión final de ver su trabajo impreso. Una edición muy pequeñita, de 200 ejemplares, ya agotada en su primera edición, disponible solamente, que yo sepa, en Murcia y vía Internet.

Los artículos tratan sobre cualquier cosa, el hecho de escribir, el tranvía, la campaña de ventas navideña, la política, la felicidad, ecología, pobreza, el sexo, los gatos... y más temas demasiado inclasificables como para definirlos con una sola palabra. Todo ello bajo el mismo denominador común... la forma directa de escribir de Enrique, sin rodeos, lanzando sus ideas a la cara del lector sin paños calientes de ningún tipo. Él mismo se lamentará en uno de los últimos artículos sobre las limitaciones del lenguaje, algo que en verdad habría más bien que agradecer en este caso :-). El libro rebosa de humor negro, negrísimo, ideas desmadradas y corrosivas aunque de ninguna manera gratuitas y centradas a provocar por provocar... mucha mala leche pero también dobles, y triples, lecturas. Naturalmente que una obra así no es para cualquier tipo de lector, Enrique se ha asegurado a través de la forma del libro, de la información disponible en Internet y demás de advertir sobradamente al lector. El libro es como uno de esos animales venenosos que lucen vistosos colores... no para presumir, sino para advertir a los posibles depredadores "¡no me comas  que soy venenoso!"... de modo que ha hecho muy bien, el que se las entienda con un libro como este, con indicativos de advertencia por todas partes y luego se le indigeste y se sienta ofendido vendría a ser como el gilipollas que se echa una avispa a la boca para "ver a que sabe"... ni las gallinas, que parecen el colmo de la estupidez, harían algo semejante... de modo que advertido queda el lector.

Personalmente he disfrutado con el libro, alguna carcajada me ha sacado y algún artículo me ha causado un ríctus de asco... no estoy de acuerdo con parte de las opiniones que esgrime en el mismo y hay veces que uno piensa "maldita la gracia"... pero algo tiene que te incita a leer y leer y por más que recibas advertencias no haces caso, por más que veas esos símbolos de "tóxico", que me recuerdan a los viejos rombos de las peliculas de la tele, en los márgenes nunca desvías la vista ... más bien al contrario, si tiene dos rombos o es para mayores de 18 o se advierte "la película puede herir la sensibilidad del espectador"... o como en este caso ves uno, dos o tres símbolos de toxicidad sucede justo lo contrario, el morbo te lleva precisamente a leer con más atención esas partes, morboso que es uno, que le vamos a hacer.

Al final todo ese desfile de brutalidades, ideas corrosivas, exhaltación de lo políticamente incorrecto, y sobre todo sinceridad a raudales produce el efecto contrario, uno percibe claramente, tal y como comenta el psicólogo Pedro Jara Vera en ese acertado epílogo, que hay más de lo que parece, que esa rabia y ese desprecio hacia el ser humano no hace sino esconder la tristeza y decepción por lo animales que somos y que hay, tal y como ocurría con el humor de nuestro inmortal Quevedo, mucha amargura tras la risa, una risa que nunca es frívola ni situa a su protagonista en un plano de superioridad moral sino que actúa como un taladro, como un revulsivo para intentar hacernos reflexionar sobre muchas cosas.

"Dicen que el toreo es un arte. Sin embargo, si no hubiera cogidas y muertes, no habría peligro, y sin peligro o brutalidad, el toreo, como cualquier otra tradición española, carecería de interés. Nuestras tradiciones consisten en una guerra de tomates, tirar a una cabra desde lo alto de un campanario, pegarle fuego a obras de arte, deflagrar varias toneladas de pólvora o soltar toros bravos por las calles para que cojan a alguien."

Más información sobre el libro y su autor aquí.


Lo mejor: Un proyecto valiente y original, a pesar de las advertencias la verdad es que se lee casi de un tirón... uno ya está inmune a todos los venenos literarios excepto a uno, al aburrimiento, contra eso ni hay ni querría si lo hubiera antídoto alguno. Afortunadamente no es ese el veneno que contiene este libro-botella de Enrique, me ha gustado mucho y sinceramente espero que siga escribiendo mucho más.


Lo peor: Algo que ya he apuntado anteriormente, este no es un libro para cualquiera, conozco un buen puñado de personas a los que no lo recomendaría ni de coña, realmente si uno analiza el tema un poco se da cuenta de que hay muchos filtros que dejarían fuera a muchos potenciales lectores, los amantes del "buenrollismo" y lo políticamente correcto, fuera, los que se quedan en las formas sin intentar ir más allá, fuera también, los que disfrutan como enanos con los últimos best sellers y con los Premios Planeta, a este que ni se acerquen so pena de sufrir graves quemaduras oculares, y los peores de todos, los que leen esas falsas y pastelosas autobiografías de famosillos y políticos... bueno, de algo tienen que vivir los pobres negros literarios, de verdad que espero que Enrique no sea uno de esos, no puedo imaginarme peor destino para un escritor que ser el negro literario de la Duquesa de Alba o del Sr. Aznar o Zapatero, es un nivel de horror que excede mi imaginación y que dejaría plenamente justificados el suicidio o la drogadicción :-P.


El problema de Spinoza


Ficha: "El problema de Spinoza", Irvin D. Yalom, editorial Destino, 460 páginas, ISBN: 978 842 3346 141

Estoy de suerte, hace bien poco que me intereso por la filosofía, un año y pico, encuentro en Baruch Spinoza uno de mis filósofos favoritos y encima publican recientemente un par de novelas donde el pensador holandés del S. XVII y sus ideas forman parte esencial de la trama... esta es una de ellas, que para más casualidad acaba de ser publicada en castellano y estaba recién adquirida por la Biblioteca Regional... siempre es agradable leer justo lo que más te gusta, justo lo que buscas en ese momento y encima sin gastarte un euro :-).

Spinoza ya era, junto con Leibniz, el protagonista de ese gran libro comentado aquí "El hereje y el cortesano" una de esas lecturas que todo buen aficionado a la filosofía debería leer de rodillas en señal de respeto... uno de estos días lo volveré a sacar de la biblioteca para darme el gustazo de leerlo por segunda vez, pero mientras tal cosa no ocurre seguiré leyendo todo lo que "huela" a Spinoza y que caiga al alcance de mi mano. 


Este libro es diferente, aquí ya no estamos ante un ensayo sino ante una novela, basada además en un hecho histórico, poco después de la ocupación alemana de Holanda en 1.940 el "Reichsleiter" Alfred Rosenberg y su unidad encargada del expolio de obras de arte y demás bienes culturales de los museos de los países ocupados irrumpió en Rijnsburg, un pueblecito cerca de Amsterdam, donde Spinoza residió durante unos años antes de trasladarse a su última vivienda en Voorburg cerca de La Haya; entraron en la que fue su casa, convertida en museo, para confiscar los libros de la misma... afortunadamente no descubrieron a una mujer judía que se ocultaba en el ático, esta mujer conseguiría sobrevivir y estamparía su firma en el libro de visitas del museo años después. Los libros incautados, que no eran los originales de Spinoza ya que estos fueron subastados aunque si que pertenecen a la misma época y número de edición que aquellos que fueron de su propiedad, permanecieron durante el resto de la guerra en una mina de sal en Alemania, de donde fueron recuperados en su casi todalidad y vueltos a llevar al museo de Spinoza donde permanecen hasta el día de hoy... ¿Qué llevó a los nazis a expropiar una colección de libros del siglo XVII que habían sido lectura de un filósofo judío excomulgado y repudiado por su comunidad y por la iglesia durante siglos?... por lo visto Rosenberg en el informe comentó que los libros eran "de gran importancia para la investigación del problema de Spinoza". Nada más se sabe sobre el hecho... aquí, en este punto, conocedor de este enigma sin aclarar es donde Irvin D. Yalom, norteamericano descendiente de judíos rusos, catedrático de psiquiatría, psicoterapeuta, gran aficionado a la filosofía y escritor de éxito comienza a escribir su novela. 

Este escritor ha sido todo un descubrimiento, sus otras novelas publicadas "El día que Nietzsche lloró" y "La cura Schopenhauer" se centran así mismo en grandes filósofos con una historia sobre sus vidas... no tardarán mucho en ser leídos por mí y comentados aquí me temo. En este combina sus habilidades de novelista, investigador de la historia, filosofía y sobre todo su gran especialidad, la psicoterapia. 

Así veremos como la novela se articula en torno a dos personajes completamente diferentes, el nazi Alfred Rosenberg y Baruch Spinoza. La idea central de la misma consiste en la fascinación por Rosenberg sobre la figura del gran filósofo holandés, o más bien sobre la especulación de en que prodría consistir la misma. Asistiremos a la vida cotidiana de Spinoza, Bento para los amigos, en la supuestamente progresista Holanda del diecisiete, sus problemas con la comunidad judía, la dificil relación con sus hermanos, su excomunión y finalmente su exilio. Veremos también la vida de Rosenberg, sus ideas antisemitas, sus lecturas de aquella época y su obra que constituyó uno de los pilares del ideario nazi, veremos su lenta y accidentada ascensión en el partido y su siempre conflictiva y problemática relación con Hitler y demás gerifaltes nazis. 

Tanto en uno como en otro caso Yalom se sacará de la manga a dos personajes que vendrían a ser una especie de proyección personal suya, Franco Benítez un judío amigo de Spinoza que se salta a la torera el "herem" o decreto de excomunión para seguir manteniendo contacto con su amigo, algo que evidentemente no ocurrió en la realidad, y Friedich Pfister, un psicólogo de la entonces muy en boga corriente del psicoanálisis que mantendrá una amistad con Alfred Rosenberg e intentará "psicoanalizarle"... no solamente para ayudarle sino para intentar erradicar, o al menos hallar el orígen, de las ideas antisemitas que anidan en su cerebro... algo que seguramente el propio Yalom habría hecho, tanto en uno como en otro caso.

El hecho de conocer la historia de los dos personajes, el exilio y vida en soledad de Spinoza, o el papel como agente del régimen nazi de Rosenberg hasta su condena a muerte en la horca por el tribunal de Nuremberg acusado de crímenes contra la humanidad, no resta un ápice al interés de la novela... poco a poco se va desentrañando el "problema de Spinoza", la vida de ambos es suficientemente interesante como para captar el interés del lector, la poderosa y también contradictoria filosofía de Spinoza, contradictoria no en su formulación sino en su puesta en práctica y las patéticas y despreciables, por no decir directamente vomitivas, falacias sostenidas por Rosenberg dan mucho juego. Ambos y por muy diferentes motivos serán objetivo del análisis de Yalom desde su perspectiva de psicoterapéuta, los aficionados a la psicología también disfrutarán de este libro.



Lo mejor: Intrigante, ameno, bastante acertado en el tratamiento de los personajes... aunque no pretende ser un ensayo esta novela tiene un pié firmemente asentado en el género. Muy buena, aunque tengo algunas reservas, la recreación del mundo personal de Spinoza... no ya en cuanto a su filosofía, aunque bastante hay de ello en el libro, sino en su vida personal y como sus ideas terminaron moldeando su existencia. Interesante también ese descenso a las tinieblas del pensamiento de un antisemita, alguien que fue ninguneado y despreciado sistemáticamente por sus propios compañeros de partido... una figura trágica y a la vez patética, como todos los ideólogos nazis una mezcla de ignorancia supina agregada a un dogmatismo rígido que incumple la norma más elemental de cualquier filósofo o penador, el cuestionarse a sí mismo y  sus propias ideas. En definitiva una apariencia de sabiduría y erudición que no era en el fondo más que una cáscara vacía, el patetismo de alguien que sostiene premisas falsas y encima cree en ellas con todas sus fuerzas contra viento y marea sin un ápice de crítica.


Lo peor: El Dr. Yalom especula demasiado, puede hacerlo y tiene libertad para ello ya que hablamos de un relato de ficción, pero aun así a uno le queda la sensación de que, sobre todo en el caso de Spinoza, ha hecho trampa. La inclusión de un psicoterapeuta que trata a Rosenberg es bastante rocambolesca ya que sería complicado que este mantuviese relación alguna con nadie relacionado con el judío Freud, vamos ni de lejos... y el "más difícil todavía" lo vemos con la relación entre Franco Benítez y Bento Spinoza... hacemos llegar al siglo dieciséis un personaje del futuro, el Sr. Benítez posee una mentalidad más propia de nuestra época, siglo XXI, de ahí que trasladarle en el tiempo y confrontar sus ideas con Spinoza... bueno, ahí queda dicho, me sigue pareciendo que Yalom juega sucio aunque esté de acuerdo con Benítez en su crítica a la postura del bueno de Bento acerca del papel de la razón y las pasiones en la vida.


viernes, 26 de abril de 2013

La revolución de la fraternidad


Ficha: "La revolución de la fraternidad", Paloma Rosado, editorial Destino, 180 páginas, ISBN: 9788423346400 

Suelo tener muy en cuenta las recomendaciones de la revista "Filosofía Hoy", tanto en la versión de papel como en todo lo que ponen en su perfil de Facebook, en este último vi recomendado este trabajo de la periodista Paloma Rosado, el libro salió a la venta hace muy poco, este mismo mes de abril, de modo que era una ocasión inmejorable para echarle un vistazo. Me dió buena impresión y me gustó la idea germinal del mismo... de modo que aquí esta ya, convenientemente leído, preparado para ser comentado.

La idea del mismo surge de un pensamiento del recientemente fallecido José Luis Sampedro sobre los ideales de la revolución francesa, libertad, igualdad, fraternidad... en este se comenta que el primero ya fue recogido por el capitalismo y el liberalismo económico, dando como resultado el actual mundo pleno de desigualdades monstruosas fuente de innumerables problemas y conflictos, el segundo fue la bandera esgrimida por los movimientos de izquierda que desembocaron en los regímenes comunistas... que terminaron asfixiando la libertad individual convirtiéndose en sistemas totalitarios ¿qué pasa pues con el tercero?, la fraternidad ha sido desde el principio el patito feo, el ideal más apartado y despreciado mientras que la libertad y la igualdad, conveniente e interesadamente magnificados según la tendencia política, se convertían en los incuestionables protagonistas.

Paloma expone en este libro que solamente una nueva corriente ideológica y reformadora basada en la fraternidad humana puede tener futuro o al menos intentar traernos un futuro mejor. La autora está convencida en que la evolución humana sigue su curso y que lleva precisamente ese rumbo, la aparición y evolución del neocortex, esa relativamente nueva construcción cerebral que nos diferencia de los animales menos evolucionados corre paralela a la evolución social que podemos apreciar si evitamos cegarnos con el pesimismo y aparente sinsentido del mundo actual. Paloma recoge muchos trabajos, entre ellos el de Steven Pinker que anda empeñado, esgrimiendo estadísticas a mansalva cuando hace falta, en demostrar en que vivimos en la época menos violenta de la historia. Evolución humana, evolución social, tecnológica y evolución educativa van pues de la mano, es un proceso imparable.

Me ha venido a la mente una y otra vez leyendo este libro un ensayo de conclusiones diametralmente opuestas "Perros de paja" de John Gray, un libro excelente a mi entender aunque solo me parece brillante en su análisis del pasado... en cuanto a su proyección en el futuro creo que peca de ceguera total basándose en la premisa, creo que errónea, en que el ser humano no evoluciona como especie. Paloma posee un enfoque completamente distinto, el suyo es un libro lleno de optimismo y esperanza en el ser humano y eso es un verdadero bálsamo en estos tiempos que corren. Su afirmación de que el pesimismo posee un prestigio intelectual inmerecido me ha hecho reflexionar bastante... 

La revolución de la fraternidad no es un asunto sencillo, incluye muchos aspectos, un cambio de mentalidad (que la actual crisis podría favorecer), un trabajo interior individual, y por supuesto un cambio en la educación... no es algo que se produzca de la noche a la mañana y sin esfuerzo pero lo importante es percibir que se están dando los pasos en esa dirección. Renovación, desaprendizaje, acción social, solidaridad... el libro está pletórico de ideas que caminan todas en la misma dirección, la clave está precisamente ahí, en la fraternidad, es el mejor antídoto contra radicalismos y dogmatismos de ninguna especie, verdaderas lacras seguramente más propias del cerebro reptiliano que del neocortex evolucionado :-)

Lo mejor: Un libro interesante y bonito, quizás excesivamente optimista, quizás más realista de lo que parece... Puede parecer un idealismo vacío basado más en el "como deberían ser" las cosas en vez del "como son realmente" si no fuera porque las evidencias sobre el cambio de los tiempos, a mejor, están ahí para el que las quiera ver naturalmente. No hace tantos años eran impensables las manifestaciones por la paz, el activismo social, el intentar establecer una alternativa al PIB basado en la felicidad, no en la riqueza per capita... cada vez se cuestiona más, al menos en occidente, el sistema de valores de la sociedad basada exclusivamente en el consumo... indicios sin duda de que nos movemos hacia esa revolución de la fraternidad aunque resulte dificil de creer. Para todos los que ven el futuro con optimismo a pesar de todo este trabajo les reafirmará en su postura.

Lo peor: Demasiado breve y disperso, lo primero podrá parecer una virtud para muchos pero no para mí, acostumbrado a obras más voluminosas. Personalmente creo que sobra el test de empatía y tampoco convencerá demasiado a los pesimistas, que son legión y parece que siempre tienen razón... el tiempo lo dirá.


Fuera de la cabeza


Ficha: "Fuera de la cabeza", Alva Noë, editorial Kairós, 250 páginas, ISBN: 978-84-7245-743-0

Fué una sorpresa encontrarme este libro hace ya unos meses alineado con los habituales ensayos de esta editorial. Psicología, espiritualidad y orientalismo son sus temas principales, he leído algunos libros de esta editorial y aunque los considero trabajos serios la neurología no está precisamente dentro de los temas que suelen abarcar. Son libros que rozan la frontera entre la ciencia y la pseudociencia, también la filosofía... un terreno bastante ambiguo y nebuloso donde seguramente no entraría una editorial con firmas más prestigiosas o al menos más alineadas con la ortodoxia científica. Tampoco estamos ante una editorial centrada en las pseudociencias, ocultismo y demás "magufadas" con perdón... por eso me extrañaba encontrar uno de este tema, la neurología, con este sello editorial.

Al poco de comenzar a leerlo quedó bien claro el porqué a los editores les había interesado... es un buen libro, interesante y bien escrito, pero alineado claramente con una teoría heterodoxa que sostiene su autor, un filósofo, acerca del estado actual de las investigaciones del cerebro. Me temí lo peor, ultimamente soy bastante enemigo de temas contraculturales que no estén sostenidos por pruebas científicas porque creo que en general constituyen una gran estafa y tomadura de pelo al lector... sin embargo al ser un trabajo eminentemente filosófico no iban por ahí los tiros precisamente.

No conozco una materia que esté más cuestionada ultimamente que la filosofía, nadie se pregunta si la medicina, la física, la historia y demás sirven para algo. Parece que el mero hecho de formar parte de las ciencias, aunque hablemos de ciencias tremendamente abstractas como las matemáticas que son inaplicables a problemas del mundo real en un 90%, como mínimo, es toda una garantía, y todo aquello que forme parte de la rama de las humanidades está bajo sospecha. Lo más "sospechoso" de inutilidad total viene a ser la filosofía, algo con lo que incluso parecen estar de acuerdo las autoridades educativas de nuestro querido país.

Pues bien, este libro demuestra que la filosofía, al menos la que hacen profesionales con una buena base científica como Alva Noë puede ser útil. Este investigador y filósofo norteamericano de ascendencia alemana trata de poner un poco de cordura y sentido común al ultimamente desmadrado mundo de la investigación neurológica. Un intento que seguramente provocará más de un rictus de desprecio en el mundo académico pero que no estaría de más que más de un investigador del tema tuviera muy en cuenta... a pesar de que sus conclusiones, de ser ciertas, seguramente pondrán muchas líneas de investigación en aprietos.

El cerebro está de moda, hay montones de libros sobre el tema, cada vez más, yo mismo tengo dos o tres por ahí sin leer todavía, el Sr. Punset, Oliver Stacks, Antonio Damasio, Ramachandran... etc sin embargo cuando aborde dichas lecturas no tendré más remedio que tener bien presente este de Alva Noë. Y tendrá que ser así porque el filósofo americano advierte en el mismo del error que parecen sufrir la mayoría de las investigaciones sobre el cerebro... dan por supuestos muchos investigadores de que la realidad tal y como la percibimos es una mera construcción de ese misterioro órgano rosado de un kilo alojado en una oscura y protegida cavidad ósea.  

Para el Sr. Noë esto simplemente es colocar el carro delante de las mulas... él niega que el cerebro sea una especie de "caja negra" encargada de procesar nada, y mucho menos de que se encargue de construir esa realidad para nosotros. La realidad existe, y es como es independientemente de nuestra percepción de la misma. En el caso de la vista por ejemplo percibimos con nuestros imperfectos órganos de visión dos imágenes separadas, invertidas, borrosas debido a las venas, materia orgánica y nervios que pasan por delante de las células receptoras de luz... y todo ello es transformado en una sola imágen más o menos nítida y puesta del derecho, de ahí que el cerebro parezca que "construye" algo... precisamente hace todo este trabajo para que captemos la realidad lo más fielmente posible. Ya sabemos que la percepción es imperfecta, que el cerebro puede ser engañado de mil maneras por las ilusiones ópticas... vale, pero es el mundo de ahí fuera el que ha condicionado el tratamiento de la información que percibimos aquí y no al revés... no construimos nuestro mundo en base a un trabajo de procesamiento del cerebro, más bien el cerebro es el que se adapta a lo que percibe fuera y simplemente se convierte en una herramienta... de ahí que Alva Noë suelte la siguiente bomba "la consciencia no reside en el cerebro".

A quien lea la anterior linea le parecerá que Alva Noë se va a poner a hablar del alma, espíritu y esencias inmateriales porque si eso que llamamos consciencia no reside en el cerebro ¿entonces dónde?, la clave según este filósofo, e investigador, eso no hay que olvidarlo, es que NO SOLO reside en el complejísimo órgano craneal, sino que hay que hacerla extensiva a todo el cuerpo. El cuerpo no es solamente un apéndice sensorial del cerebro... si así fuera solo seríamos meras máquinas asociadas a un centro de procesamiento ¿tendríamos pues conciencia?... para este filósofo definitivamente no, igual que no posee conciencia un ordenador independientemente de su potencia de procesamiento. Es una idea complicada de seguir, controvertida y seguramente si no es más polémica serguramente será porque este autor es poco conocido... sin embargo el ver la firma de Oliver Staks en la contraportada recomendando encarecidamente su lectura es para mí toda una garantía. Reflexionando un poco sobre lo que el autor nos explica en el libro uno se da cuenta de lo rudimentarios que son los métodos científicos asociados al cerebro, por muy sofisticados que parezcan a los profanos, y el gran camino que todavía le queda a esta disciplina antes de poder ser mínimamente fiable y poder desentrañar el gran misterio de la consciencia, aunque sea un poco.

Lo mejor: Gran claridad expositiva, toneladas de sentido común... Alva Noë muestra como la filosofía puede ayudar a la ciencia al poseer una visión más ámplia en general y no pecar del excesivo reduccionismo que suele poseer esta. Naturalmente antes de opinar sobre temas científicos hay que proveerse de los necesarios conocimientos, pero tampoco hay que ser un neurobiólogo de categoría mundial para percibir que el enfoque de algunas investigaciones puede estar sencillamente equivocado. Creo que ese es un punto donde el autor brilla especialmente, o al menos así se lo parece a un lector aficionado a estos temas, el tiempo dirá si el libro queda en una mera anécdota o bien capta la atención de los científicos. Dada la sencillez de sus ideas me extrañaría mucho, muchísimo que parte de sus exposiciones no hayan sido ya tenidas en cuenta por los mismos investigadores.

Lo peor: La visión holística que propugna el Sr. Noë ofrece muchos problemas, es más sencillo experimentar con cerebros muertos en laboratorios, usar los escáneres cerebrales más avanzados y demás parafernalia científica sobre cerebros en funcionamiento pero en una situación anómala. Es lo que pasa cuando se usa el método reduccionista de ir de más a menos, hay que compartimentar, desmenuzar, ir a lo más simple... mientras no sea posible observar el funcionamiento de un cerebro vivo en tiempo real realizando las funciones normales y habituales en su entorno natural a lo largo de un dilatado periodo de tiempo y a la vez con el suficiente nivel de detalle podremos realizar progresos realmente importantes. No creo que el libro termine constituyendo ningún éxito o que el autor se embarque más adelante en trabajos similares, esa es mi impresión.


jueves, 11 de abril de 2013

Todo lo que sé lo aprendí de la tele


Ficha: "Todo lo que sé lo aprendí de la tele", Mark Rowlands, editorial Edaf, 309 páginas, ISBN: 978 844 1420144

A comienzos de año tuve la oportunidad de leer un libro de divulgación filosófica relacionada con elementos de la cultura popular, se trataba de "El Señor de los Anillos y la filosofía", un libro que venía a sumarse a una moda iniciada hace unos pocos años, tratar de vendernos la simple divulgación de la filosofía con el gancho de películas y series conocidas de sobra por todos. Confieso que el libro terminó cansándome y tuve la sensación de que no hubiera sido escrito jamás de no haberse estrenado las películas del Sr. Jackson que elevaron la ya gran popularidad del libro de Tolkien a niveles impensables hace tan solo poco más de una década.

Así que me dije "ninguno más de este tipo", tras año y medio interesado por la filosofía y formando la misma actualmente mi tema favorito de lectura en este 2.013 me propuse leer menos libros pero abordar lecturas más técnicas, ir directamente a las obras de filósofos conocidos, siempre que fueran asequibles a mi nivel de neófito en el tema claro... eso excluía de raíz cualquier aproximación al libro que quiero comentar hoy en este blog. Sin embargo no he podido evitar caer en la tentación no solamente de leerlo, sino también de comprarlo y disfrutar mucho con su lectura. Había varios motivos, concretamente tres, que más allá del consabido "porque me sale de ahí", como diría Bart Simpson, explican su elección.

Primero, el libro "El filósofo y el lobo" de Mark, comentado aquí hace poco, me dejó tan buena impresión que me dije que tenía que leer como fuera todo lo que se publicase en castellano de este hombre. 

Segundo, en la revista "Filosofía Hoy", de la que soy un devoto seguidor, publicaban un artículo donde se hacían eco de esta relativamente nueva moda en el campo de la divulgación filosófica y donde se valoraba muy positivamente esta obra de Mark... probablemente la mejor de las disponibles en nuestro idioma al día de hoy.

Tercero, en el libro de Rowlands antes mencionado el autor realiza un irónico comentario sobre el éxito que tuvo el libro que aquí comento donde dice si no recuerdo mal "escribí aquel libro casi íntegramente bajo el influjo del alcohol, así salió".

Este por lo tanto es un texto escrito durante largas noches de soledad con una botella de Jack Daniel's a la mano y junto a un lobo aullando a la luna... ¿álguien podría resistirse a una obra semejante? ;-). Bromas aparte, en él Mark no hace alusión a sus frecuentes borracheras de aquella época, hoy es un responsable padre de familia, pero sí que lo hace en cambio en algún momento a algo relacionado con las mismas, al hecho de escribir bajo el influjo de la resaca... he de comentar que se nota, se nota tanto el efecto de haber escrito bebido como con la cabeza empanada por la resaca. No quiero ni pensar si este es el texto "expurgado" por el editor donde se habrán corregido muchos excesos como sería el manuscrito original.

Buffy cazavampiros, Los Soprano, Sexo en Nueva York, Friends, 24, Seinfeld, Los Simpson y Frasier son las series utilizadas como excusa de otras tantas grandes cuestiones filosóficas. ¿Cuáles son nuestras obligaciones cara a los demás y respecto al mundo? ¿Puede una buena persona llevar a cabo malas acciones? ¿En qué consiste la felicidad? ¿Qué es el amor? ¿Qué es la justicia? ¿Hay algo malo en ser egoísta? ¿En que consiste el buen vivir? y finalmente ¿Cómo conocerse a uno mismo?... Grandes cuestiones que han mantenido entretenidos a los filósofos durante siglos y siglos y que todavía están muy lejos de dilucidarse por completo. Los ejemplos que en un libro de otro tipo tendría que inventarse el autor aquí le vienen dados... justamente por los personajes y el argumento de estas series enumeradas, conocidas de sobra por todos, o fácilmente accesibles mediante Youtube como ha sido mi caso en alguna de ellas.

Así que lo bueno es que aquellos que gustan de temas filosóficos están de enhorabuena, van a tener tema de sobra para leer, Mark no es un escritor que se contente con una aproximación superficial a los temas, pero tampoco es un erudito cansino que nos abruma con datos y páginas y páginas con referencias múltiples... es un libro de divulgación para el gran público, para gente que en su vida se ha acercado a la filosofía y eso es tenido siempre muy en cuenta. Ahora bien, tampoco es un libro dirigido a los fans de estas series... entre otras cosas porque me extrañaría mucho, dada su variedad temática, que hubiera alguien que gustase de las ocho series de las que trata esta obra. Las hay para todos los gustos, superficiales y tontorronas como Seinfeld, dramáticas y crudas como 24, ingeniosas como Los Simpson y para puros "frikis" sin remedio como Buffy. Humor chorra y descafeinado se mezcla con ironía y humor inteligente, el humor negro y la violencia de Los Soprano con la adrenalina de 24... Mark nos cuenta con pelos y señales de que va cada una de ellas, en ocasiones parece que las copas le afectan un poco al cerebro cuando se enreda en sus argumentos... pero en cuanto entra en su terreno, en la divulgación filosófica, no en vano es profesor de esa materia, entonces es cuando dan ganas de quitarse el sombrero.


El libro tiene un arranque sencillo pero poderoso, un prólogo donde se analizan las cuatro características, a juicio del autor, con las que podríamos evaluar eso tan nebuloso e impreciso llamado "modernidad", ese prólogo será una especie de referencia y vara de medir con la que juzgará posteriormente las lecciones extraidas de cada serie... así Buffy Cazavampiros nos ilustrará el tema de la modernidad y las obligaciones para con los demás... de paso se hace una buena incursión por terrenos existencialistas y se nos presentará la figura de Sartre. Los Soprano servirá de excusa para hablar del subconsciente, de Freud, y de el bien y el mal. Sexo en Nueva York tratará del tema de la felicidad... entre otros se hablará de Aristóteles. Friends se centrará en la amistad y el amor, diferencias y semejanzas, ahí serán Platón, Schopenhauer y finalmente de nuevo Aristóteles los que nos hablarán, por boca de Mark, sobre la idea del amor... 24 traerá toda una disquisición filosófica sobre la justicia y el eterno debate de si el fin justifica los medios, naturalmente los filósofos utilitaristas como Jeremy Bentham y John Rawls con su teoría de la justicia serán citados extensamente... Los Simpson nos descubrirán distintas formas de encarar la vida, estoicismo, epicureismo, Nietzsche, la moral católica... y finalmente Frasier, de la mano de la filosofía de David Hume nos arrojará al tema siempre complicado del conocerse a sí mismo. Y eso a grandes rasgos porque el libro está trufado de múltiples referencias filosóficas... el libro comienza con un tema, se presenta a continuación la serie y luego se pierde por mil razonamientos y argumentaciones, nunca sabes hacia donde te va a llevar el autor, un viaje caótico, imprevisible y sobre todo fascinante.

"Nuestras vidas están marcadas por la superficialidad. Nos dedicamos a matar el tiempo y, después, morimos.
Poco de grandioso podemos descubrir en esa clase de vida. Poco que parezca tener un significado o un sentido. Es uno de los riesgos del pensamiento moderno. A estas alturas ya no quedan muchas cosas por las que estemos dispuestos a jugarnos la vida y, en consecuencia, nuestras vidas se empobrecen cada vez más. Hasta el punto de que esa cortedad de miras amenaza con socavar hasta la idea de sentirnos a gusto con nosotros mismos, la misma que late en el meollo del pensamiento moderno. Si las elecciones que tomamos y que definen nuestras vidas no guardan relación con algo que tenga un significado o un valor reales, si da lo mismo optar por una cosa o por otra, la idea de sentirse a gusto con uno mismo se convierte en un concepto nulo y vacío. De forma que el peligro de la modernidad constituye, asimismo, un peligro para la modernidad, una amenaza que acabará por erosionar sus propias premisas hasta que resulte barrida por el torbellino de la historia."


Lo mejor: Escrito en un estilo directo, sencillo y lleno de ironía, Mark nos ofrece unas clases veraderamente interesantes sobre filosofía. A diferencia de otras obras que suelen dejar en el aire más interrogantes que los que resuelven, Rowlands suele llegar a conclusiones, discutibles como todo, allá donde considera que es posible. Por lo tanto es un libro que no solamente expone un tema y nos hace partícipes de su complejidad sino que también aclara muchas ideas. A diferencia de otros autores de libros de esta temática, que dan la impresión cuando escriben de andar embutidos en un traje almidonado, Mark dota a su obra de sentimiento y sentido del humor... sin duda alguna es uno de esos filósofos a los que valdría la pena conocer en persona y compartir con ellos una pinta de cerveza en un pub, algo que no puedo decir de todos los autores que he leído ultimamente, me refiero a los vivos naturalmente ;-).



Lo peor: En ocasiones las reiteradas alusiones a la serie entorpece las argumentaciones y simplemente están de más, en la era de Internet no tiene sentido que nadie nos cuente con pelos y señales de que va tal película o tal serie si podemos verla en casa en cualquier momento. Estos enredos del autor con el argumento de las series son para mí lo más prescindible del libro, seguramente porque las mismas me importan bien poco... pero en el caso de que no hubiera sido así y fuese un verdadero fan de alguna de las series me hubiera llevado un buen chasco, hay toneladas de filosofía en este libro, algo que inevitablemente se le atragantará al lector incáuto que se acerque a esta obra simplemente por su vertiente televisiva... sinceramente yo no creo que hubiese aguantado ni diez páginas de haberlo leído en la época en la que Mark lo escribió.

viernes, 5 de abril de 2013

El arte de la existencia



Ficha: El arte de la existencia, Josep Muñoz Redón, editorial Paidós, 188 páginas, ISBN: 9788449327209

Dentro de los ensayos de filosofía abundan mucho últimamente los dedicados a la divulgación destinados al gran público no especializado, personalmente ultimamente siento debilidad por tales libros de ahí que no deje de leer y comentar aquí cuantos encuentro. Los hay centrados en vidas de filósofos, en libros de filosofía o simplemente en ideas y temas... en ese grupo podríamos encuadrar este de Josep Muñoz Redón, profesor y prolífico autor con una veintena de títulos ya en su haber. Este es el primero de los suyos que leo, en nuestro país hay muy buenos autores de este subgénero de divulgación filosófica y Josep es un ejemplo.

No he podido evitar recordar al abordar esta obra ese otro libro ya comentado aquí "El placer de vivir" de Compte-Sponville, aunque en este caso se trataba de una recopilación de artículos de este filósofo francés y no de un libro escrito ex-profeso como el de Josep. No obstante la idea es la misma, breves capítulos formados por artículos sobre los más diversos temas.

El libro comienza de sopetón, no hay ninguna introducción del autor, y comienza con lo que Camus consideraba el problema capital de la filosofía, la voluntad de vivir y su relación con el suicidio... será el primero de cincuenta capítulos breves, más bien cincuenta artículos de una dimensión que oscila entre las dos y las tres páginas y que tocan los más variados temas. Si queremos acudir a un párrafo introductorio que nos presente la obra hay que leer en su contraportada.

En la misma, seguramente obra del editor, se nos presenta la intención del libro... la que podría considerarse como la verdadera "piedra filosofal" de la filosofía, que no consiste en mostrar una guía de la vida o unas enseñanzas llenas de sabiduría, hace mucho tiempo que tal trabajo fue terminado y está disponible para todo aquel que quiera leer... la clave consiste en salvar el abismo entre las enseñanzas de los más grandes sabios de todos los tiempos y la vida real, esa en la que todos vivimos realmente. De ahí que en cada artículo se cubra un tema importante y cada uno de los mismos tenga un gran filósofo protagonista, o más de uno... a ver si nos sirve de inspiración.

El problema del sentido de la vida, el significado del pensar, la angustia de vivir, el descanso, los sueños, la inteligencia, la prisa en el mundo moderno, la comida y sus rituales, la imaginación, la lectura, la escritura, el trabajo, el disfrute de la vida... cincuenta artículos, cincuenta temas y otras tantas lecturas recomendadas sobre cada uno de ellos. Josep nos hace partícipes de las ideas de los grandes filósofos, abundan las referencias y las citas, pero también las ideas propias y las enseñanzas entresacadas de su vida personal y siempre en un tono directo, ameno y claro... es un libro que ofrece todo un "picoteo" como una de esos menús tipo buffet, se nota que su autor se ha divertido escribiéndolo.

"El color ala de mosca me sirvió para describir la ropa de un abuelo con el que compartía todas las tardes en la mesa de la biblioteca municipal de mi pueblo, una versión actualizada del autodidacta sartriano; los colores primarios son especialmente apropiados para los niños; los colores fríos limpian el espíritu de la contaminación de las palabras; los colores calientes hacen hervir la olla del pensamiento; los colores nacionales me dejan indiferente; los colores rotos no se pueden engancar ni con pegamento; los buenos colores nos alejan de la muerte, de la misma manera que los malos colores evocan su avaricia omnipresente. He visto y escrito cosas de todos los colores."



Lo mejor: El libro se lee en un suspiro, ese brincar de un tema a otro salpicando cada uno de interesantes referencias y citas con los añadidos de la cosecha propia del autor lo convierte en toda una perita en dulce para los lectores aficionados a la filosofía y también para todos aquellos que gustan de temas parecidos, se lo recomendaría también a los lectores habituales de psicología y autoayuda, posee una sencillez equiparable. Me ha gustado mucho ese índice final de obras consultadas en relación con cada uno de los temas... en ese aspecto cumple de sobra su cometido al proporcionarnos una pequeña guía de lecturas filosóficas recomendadas.

Lo peor: No deja prácticamente poso alguno en el lector, es un libro para tenerlo a mano y volver a releerlo varias veces de forma desordenada, su estructura y la brevedad de sus capítulos invita a ello. Aunque algunas de las ideas que muestra son importantes y de hondo calado dejará insatisfecho al lector que quede interesado por alguna de ellas, no lo recomiendo por tanto para el lector avezado en temas filosóficos, le parecerá demasiado superficial y oportunista.



"Creo que los animales ven en el hombre un ser igual a ellos que ha perdido de forma extraordinariamente peligrosa el sano intelecto animal, es decir, que ven en él al animal que ríe, al animal que llora, al animal infeliz"

Ficha: Nietzsche para estresados, Allan Percy, Ramdon House Mondatori - colección de bolsillo, 120 páginas, ISBN: 978 849 908 367

Siguiendo con la divulgación filosófica y metiéndonos ya en otro género como la autoayuda me encontré hace unos meses con este librito de Allan Percy, otro de tantos autores que han encontrado en el género de la autoayuda su filón personal. 

En este caso se toma la obra filosófica del gran pensador alemán para entresacar de la misma una serie de enseñanzas para la vida cotidiana... en total 99 citas convenientemente explicadas e interpretadas para todos aquellos "estresados", una especie de introducción acelerada en la obra nietzscheana... o más bien una promesa de ello, promesa que como veremos no termina de cumplir del todo.

Hay citas de las que el autor apenas hace un comentario, más bien banal, en otras se extiende un poco más y no suele acudir a la obra del filósofo alemán para comentarla, digamos que su frase o su pensamiento le sirve de excusa... una pena porque creo que se le podía haber sacado mejor partido a estos brillantes puntos de partida. No obstante este librito posee algunos momentos interesantes en el momento que abandonamos todo interés por el nombre escrito en grandes letras en la portada.

Lo mejor: Es sencillo, breve y se lee de un tirón. La selección de citas es muy buena

Lo peor: Quien desee una introducción a la obra de Nietzsche que busque en otro sitio. Los comentarios dejan bastante que desear, desde el nivel "interesante" al nivel "facilón" para lectores poco exigentes... francamente olvidable, una pena este destrozo con tan buen material de partida, pobre Nietzsche.