Ficha: 1.969, autor Jerónimo Tristante, editorial Maeva, 356 páginas, ISBN: 9788496748958
De nuevo tengo que comentar otra novela cuya lectura forma parte de un "encargo", del club de lectura Macondo... al igual que en el caso anterior se trata de una obra a la que dificilmente me hubiera acercado por tratarse de un tipo de lectura que se escapa de mis gustos habituales.
En este caso una novela policíaca escrita además por un "paisano" de Murcia, no se que pasa que ultimamente hay como una explosión de autores de la región cuyos libros llegan con facilidad a los "stands" de novedades editoriales, incluso algunos consiguen colar sus obras entre las más vendidas... esperemos que siga la racha.
1.969 nos propone un viaje por la España de las postrimerías del franquismo, el principal protagonista, Julio Alsina un policía venido a menos y casi alcoholizado se verá envuelto en la investigación de un asesinato donde terminará destapando toda una siniestra trama donde se ven envueltas distintas facciones de poder de aquella España donde si bien comenzaban a soplar aires de cambio los estamentos de poder de la dictadura todavía seguían dirigiendo el país con mano de hierro.
La acción se centra en la ciudad de Murcia y en la zona de campo situada tras la Sierra de Carrascoy cuya vista se domina desde la capital del Segura, zona bien conocida por mí en mis paseos senderistas pero básicamente desconocida para la gran mayoría de los murcianos que se sorprenderán de que tan cercano al casco urbano exista una zona tan desolada y deprimida... tal y como la retrata Jerónimo en esta novela... en eso no ha cambiado tanto después de cuarenta años. Hay una gran cantidad de detalles casi costumbristas que harán las delicias del lector murciano, referencias continuas a calles, lugares y localidades de sobra conocidos por nosotros.
No se si la intención del autor era hacer un retrato de la sociedad murciana de aquella época pero lo cierto es que lo consigue, se nota el trabajo de documentación previo a la novela y el esfuerzo por retratar como era la Murcia de aquel tiempo. Mucho hemos cambiado los murcianos y la ciudad desde entonces pero a los lectores de aquí les costará poco trabajo seguir los pasos de Julio Alsina por la ciudad. La catedral, el bar "La Tapa", la Gran Vía, la calle Almenara... un escenario insólito, al menos para mí, como marco de una novela.
No he leido casi nada del género como para poder comparar esta obra con otras similares, creo que la novela negra por sus características es poco menos que ideal para retratar ambientes y épocas. Eso quizás sea lo más interesante... de lo demás poco que decir, el único personaje interesante a mi modo de ver es el del policia protagonista. Los demás los veo demasiado planos y esquemáticos, salvo quizás el de Rosa y el de Ruiz... aunque no mucho la verdad, me da la impresión de estar ante una de aquellas novelas de "a duro" algo engordada, se trata de matar el rato y punto. En ocasiones tanto "murcianismo" llega a resultar gracioso y chocante, ese posiblemente será el rasgo de la novela que terminaré recordando durante más tiempo ya que este género no es precisamente santo de mi devoción aunque reconozco que esta novela me ha gustado.
La obra no ahorra críticas al anterior régimen y a la sociedad de entonces tachándola de conformista e hipócrita (la pura realidad, así era la España de entonces), una crítica por otro lado facilona y previsible. Naturalmente los personajes más afectos al régimen son los "malos", los perros guardianes del mismo son ya malíiiiisimos ;-) y aquellos críticos con el franquismo, los que hacen doble vida y los que se "cambian de chaqueta" son los buenos... buenisimos. Entre medias de ambos extremos simplemente la mediocridad y el conformismo, como en todas las épocas vaya.
Destaca la situación injusta que vivían muchas personas obligadas a esconder sus inclinaciones sexuales (no hay que remontarse tanto tiempo atrás por desgracia) y aquellas que tenían que llevar sus relaciones en secreto de mala manera debido a la hipocresía reinante... y todavía hasta no hace muchos años había individuos que proclamaban aquello de "con Franco vivíamos mejor"... si algunos desde luego que vivían mejor.
Lo mejor: Un ritmo ágil que no da tregua y que hace leerse la novela con rapidez, uno devora las páginas deseando ver el desenlace final de la historia y a donde quiere llegar el autor.
Lo peor: Demasiados tópicos, los lectores murcianos disfrutarán mucho más de la obra que los que no sean de aquí. Un final demasiado ñoño, como no podía ser de otra forma, ya se que es una novela pero me ha parecido demasiado "cinematográfico". Personajes poco creibles, especialmente el protagonista ¿de donde sale este tío?.. un policía como el retratado por el autor jamás reaccionaría de esa forma... bueno lo del licor 43 es ya de traca, hay que meter cosas típicas de Murcia aunque sea a martillazos. No se si era intención del autor pero me he reido un rato. Y tampoco me ha gustado el apresuramiento por resolver todas las tramas abiertas cortando por lo sano, da la impresión de que el autor crea tal berenjenal del que no sabe como salir si no es echando por la calle del medio.
Mención aparte el exceso de elementos "sexuales" que no vienen a cuento en la trama, si la intención era lanzar unos cuantos dardos a la hipocresía de la sociedad de entonces, y aunque Murcia podría ser considerada en aquel entonces (y ahora también por desgracia) como ejemplo de ciudad conservadora y "aborregada", creo que al autor se le fue la mano con ello.
De nuevo tengo que comentar otra novela cuya lectura forma parte de un "encargo", del club de lectura Macondo... al igual que en el caso anterior se trata de una obra a la que dificilmente me hubiera acercado por tratarse de un tipo de lectura que se escapa de mis gustos habituales.
En este caso una novela policíaca escrita además por un "paisano" de Murcia, no se que pasa que ultimamente hay como una explosión de autores de la región cuyos libros llegan con facilidad a los "stands" de novedades editoriales, incluso algunos consiguen colar sus obras entre las más vendidas... esperemos que siga la racha.
1.969 nos propone un viaje por la España de las postrimerías del franquismo, el principal protagonista, Julio Alsina un policía venido a menos y casi alcoholizado se verá envuelto en la investigación de un asesinato donde terminará destapando toda una siniestra trama donde se ven envueltas distintas facciones de poder de aquella España donde si bien comenzaban a soplar aires de cambio los estamentos de poder de la dictadura todavía seguían dirigiendo el país con mano de hierro.
La acción se centra en la ciudad de Murcia y en la zona de campo situada tras la Sierra de Carrascoy cuya vista se domina desde la capital del Segura, zona bien conocida por mí en mis paseos senderistas pero básicamente desconocida para la gran mayoría de los murcianos que se sorprenderán de que tan cercano al casco urbano exista una zona tan desolada y deprimida... tal y como la retrata Jerónimo en esta novela... en eso no ha cambiado tanto después de cuarenta años. Hay una gran cantidad de detalles casi costumbristas que harán las delicias del lector murciano, referencias continuas a calles, lugares y localidades de sobra conocidos por nosotros.
No se si la intención del autor era hacer un retrato de la sociedad murciana de aquella época pero lo cierto es que lo consigue, se nota el trabajo de documentación previo a la novela y el esfuerzo por retratar como era la Murcia de aquel tiempo. Mucho hemos cambiado los murcianos y la ciudad desde entonces pero a los lectores de aquí les costará poco trabajo seguir los pasos de Julio Alsina por la ciudad. La catedral, el bar "La Tapa", la Gran Vía, la calle Almenara... un escenario insólito, al menos para mí, como marco de una novela.
No he leido casi nada del género como para poder comparar esta obra con otras similares, creo que la novela negra por sus características es poco menos que ideal para retratar ambientes y épocas. Eso quizás sea lo más interesante... de lo demás poco que decir, el único personaje interesante a mi modo de ver es el del policia protagonista. Los demás los veo demasiado planos y esquemáticos, salvo quizás el de Rosa y el de Ruiz... aunque no mucho la verdad, me da la impresión de estar ante una de aquellas novelas de "a duro" algo engordada, se trata de matar el rato y punto. En ocasiones tanto "murcianismo" llega a resultar gracioso y chocante, ese posiblemente será el rasgo de la novela que terminaré recordando durante más tiempo ya que este género no es precisamente santo de mi devoción aunque reconozco que esta novela me ha gustado.
La obra no ahorra críticas al anterior régimen y a la sociedad de entonces tachándola de conformista e hipócrita (la pura realidad, así era la España de entonces), una crítica por otro lado facilona y previsible. Naturalmente los personajes más afectos al régimen son los "malos", los perros guardianes del mismo son ya malíiiiisimos ;-) y aquellos críticos con el franquismo, los que hacen doble vida y los que se "cambian de chaqueta" son los buenos... buenisimos. Entre medias de ambos extremos simplemente la mediocridad y el conformismo, como en todas las épocas vaya.
Destaca la situación injusta que vivían muchas personas obligadas a esconder sus inclinaciones sexuales (no hay que remontarse tanto tiempo atrás por desgracia) y aquellas que tenían que llevar sus relaciones en secreto de mala manera debido a la hipocresía reinante... y todavía hasta no hace muchos años había individuos que proclamaban aquello de "con Franco vivíamos mejor"... si algunos desde luego que vivían mejor.
Lo mejor: Un ritmo ágil que no da tregua y que hace leerse la novela con rapidez, uno devora las páginas deseando ver el desenlace final de la historia y a donde quiere llegar el autor.
Lo peor: Demasiados tópicos, los lectores murcianos disfrutarán mucho más de la obra que los que no sean de aquí. Un final demasiado ñoño, como no podía ser de otra forma, ya se que es una novela pero me ha parecido demasiado "cinematográfico". Personajes poco creibles, especialmente el protagonista ¿de donde sale este tío?.. un policía como el retratado por el autor jamás reaccionaría de esa forma... bueno lo del licor 43 es ya de traca, hay que meter cosas típicas de Murcia aunque sea a martillazos. No se si era intención del autor pero me he reido un rato. Y tampoco me ha gustado el apresuramiento por resolver todas las tramas abiertas cortando por lo sano, da la impresión de que el autor crea tal berenjenal del que no sabe como salir si no es echando por la calle del medio.
Mención aparte el exceso de elementos "sexuales" que no vienen a cuento en la trama, si la intención era lanzar unos cuantos dardos a la hipocresía de la sociedad de entonces, y aunque Murcia podría ser considerada en aquel entonces (y ahora también por desgracia) como ejemplo de ciudad conservadora y "aborregada", creo que al autor se le fue la mano con ello.
No hay comentarios:
Publicar un comentario